Hotel Majestic / La ironía de "restaurar" una muestra gratis

Los porteños recibimos una feliz noticia en estos días: se acerca el fin de la recuperación del antiguo Hotel Majestic, uno de los edificios más grandes e imponentes de la Avenida de Mayo, ubicado en la esquina de la calle Santiago del Estero, junto al Hotel Chile.

Luego de más de diez años abandonado, semi-tapiado, decadente, degradado, tapado con vallas, con su vereda intransitable por el bosque de andamios que salvaban a la gente de recibir un pedazo de moldura en la cabeza, y transformadas en casa temporal para quienes tienen que dormir en la calle, el Majestic poco a poco vuelve a "brillar", como lo dice la revista ARQ en su última tapa.

"Volver a brillar", intenta convencer el título.
(Fuente: Facebook de Revista ARQ)

Pero los que estudiamos la arquitectura y la historia de la ciudad, no podemos dejar de sentirnos un poco insatisfechos, y es que sabemos que este edificio fue mucho más que la cáscara pelada que nos llegó al siglo XXI.

Construido en dos etapas, entre 1905 y 1909, para la Caja Internacional Mutua de Pensiones (también conocida como "La Mutua), este edificio fue uno de los más fastuosos que lució la Avenida de Mayo en su historia, con fachadas muy sobrecargadas con todo tipo de molduras, ventanas, detalles, frontis, arcos, y hasta una pérgola en su terraza, que obviamente tampoco sobrevivió.

El Majestic, mucho antes de que se construyera su vecino edificio del Diario Crítica,
hoy en manos de la Policía Federal. 
(Fuente: AGN a través de Taringa!, usuario renegau33)

Y es que, luego de haber alojado incluso al mismo Le Corbusier, el hotel cerró y fue vendido, para terminar cayendo en manos de... el Estado Nacional, quien lo destinó a la DGI (Dirección General de Impuestos). Poco a poco la moda cambiaba, el art decó y la modernidad blanca y más abstracta iban imponiéndose, y cada vez gustaban menos los ornamentos y las fachadas tan fastuosas.

Movilización de los miembros de la Caja Internacional en su nuevo edificio.
 (Fuente: La Argentina del Centenario)

Así que un poco por eso, y otro poco para gastar menos en mantenimiento, la DGI agarró la plancha y CHAU FACHADA. Eliminó por lo menos la mitad de los elementos y objetos que formaban el frente del Majestic, y hasta reemplazó las rejas de sus balcones por parapetos de mampostería adornados "finamente" con... rombitos agujereados! Insólito...

Los balcones con rombitos (?!). 
 (Fuente: Skyscrapercity.com, usuario GuybrushThreepwood)

Gracias a dios, por algún motivo cesaron en su voluntad minimalista en el interior, y nos ha llegado bastante intacta la espectacular escalera del viejo hotel, pero con todas las cosas comentadas antes la amargura es bastante fuerte.

La decadencia total del edificio, en 2010.  
(Foto: Wikimedia, usuario Elsapucai)

Y pensar que en el 2005 el Estado llamó a concurso de arquitectura para recuperar el antiguo Majestic. Y ustedes piensan que las propuestas hablaron de recuperar lo que había sobrevivido? INCORRECTO! El premio elegido proponía seguir destruyendo el interior y vaciar partes del edificio para hacerlas más "modernas"! Menos mal que el presupuesto, o la voluntad política, no alcanzaron, y al abandono se mantuvo unos años más, hasta que comenzó la restauración que nos lleva al año 2015.

Nos despedimos por hoy con una foto de este edificio exhuberante y despilfarrante, símbolo de una generación que quiso destacarse a gritos con sus objetos de representación, entre ellos los edificios. Acompañado por otro miembro de este blog, el pobre hotel Chile, que perdió esa cúpula genial en un incendio. Mirando fotos como esta, es que se nos ocurrió el título, ya que lo que tenemos hoy en día es solo una "muestra gratis" de lo que fue.

El Majestic, acompañado por la cúpula perdida del Hotel Chile.
Fuente: Wikimedia